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La fachada de un edificio no solo es su carta de presentación, sino también una parte fundamental para garantizar la seguridad, la eficiencia energética y la durabilidad de la construcción. Saber cuándo es el momento adecuado para rehabilitarla puede ahorrarte problemas mayores y costos innecesarios. En esta guía te explicamos las señales clave y factores a tener en cuenta.

Señales visibles de deterioro

1. a) Grietas y fisuras
   Las grietas pueden ser indicio de movimientos estructurales o problemas en los materiales. Si bien algunas son superficiales, otras pueden comprometer la estabilidad del edificio.
2. b) Desprendimientos
   El desprendimiento de revestimientos o elementos decorativos no solo afecta la estética, sino que representa un riesgo para los peatones.
3. c) Humedad y moho
   Las manchas oscuras, eflorescencias o moho suelen ser resultado de filtraciones o falta de impermeabilización, un problema que puede deteriorar la estructura con el tiempo.
4. d) Desgaste de la pintura
   La pintura desgastada o descascarada no solo luce mal, sino que deja la fachada más expuesta a agentes externos como la lluvia y la contaminación.

Razones técnicas y normativas

• a) Cumplimiento de la Inspección Técnica de Edificios (ITE)
  En España, los edificios con cierta antigüedad deben someterse a la ITE, que puede requerir la rehabilitación de la fachada si no cumple con las condiciones de seguridad y conservación.
• b) Mejora del aislamiento térmico y acústico
  Si las facturas de energía son elevadas o hay problemas de ruido, una rehabilitación puede incluir soluciones como fachadas ventiladas o sistemas de aislamiento térmico por el exterior (SATE).
• c) Daños estructurales
  Los problemas internos, como corrosión en los refuerzos metálicos o deterioro en los ladrillos, son motivos urgentes para una rehabilitación integral.

Factores estéticos y funcionales

• a) Actualización estética
  Las fachadas envejecidas pueden afectar el valor del edificio. Renovarlas mejora la apariencia y aumenta el atractivo de la propiedad.
• b) Cambios de uso o necesidades específicas
  Transformaciones como convertir un edificio residencial en uno comercial pueden requerir adaptaciones en la fachada para cumplir con nuevas normativas o mejorar la accesibilidad.
• Mantenimiento preventivo: evita problemas mayores

Realizar inspecciones periódicas es clave para detectar problemas antes de que se agraven. El mantenimiento preventivo, como limpiar la fachada o reparar pequeñas fisuras, alarga su vida útil y reduce los costos a largo plazo.

¿Cuándo rehabilitar? El momento ideal

Aunque depende del tipo de fachada y las condiciones climáticas de la zona, es recomendable evaluar la necesidad de una rehabilitación cada 15-20 años. No obstante, ante señales evidentes de deterioro o si la ITE lo exige, actúa lo antes posible.

Mantén tu edificio en las mejores condiciones con una rehabilitación de fachada cuando sea necesario. ¡Una inversión en el presente protege tu patrimonio en el futuro!

Nuestro compromiso

En BCR Habitat somos expertos en la rehabilitación de fachadas, la restauración de edificios y la restauración y conservación de patrimonio. Consulte con nosotros y le elaboraremos un presupuesto a medida sin compromiso, además de informarle de nuestras condiciones de financiación.

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Imagen de la portada: vecteezy